...un intento de explicación...

Hay partes del año que me convulsionan, no me son desconocidas, además que sé que son cíclicas ( las esperas) y yo diría que muy necesarias, sabes que llegan de manera inexorable pero siempre te pillan con el paso cambiado, son...las vacaciones de los demás.

Esta semana ha sido rara y no porque me haya sorprendido cambiando los días de manera aleatoria y diera comienzo en jueves siguiendo a este el lunes para desquicie del personal, no nada de eso, comenzó en lunes y siguió su orden natural pero... ha sido el preludio a las vacaciones de un compañero, compañero con el que no puedo coincidir de vacaciones porque cuando él no está yo “juego”... más y al revés... ( pero él que hable en su blog de esto ¿no?)

Ya el lunes le vi un extraño brillo en la mirada que no me tranquilizó lo más mínimo y que fue augurio de lo que se me venía encima de los...”lomos”

A esto (que no es poco, porque mi empresa es pequeña por lo tanto nadie es ajeno a nada, no hay departamentos propiamente dicho y... cuando faltamos uno de nosotros el porcentaje de trabajador que falta es enorme, malditas estadísticas...), bien pues a esto que les cuento tengo que añadir que hace unos meses llegué a un acuerdo con mi casero ( tras duras negociaciones) y ando en reformas ( absolutamente necesarias), por lo que cuando salí el lunes (pasado) de casa a enfrentarme con la semana/preludio infausta dejé en mi casa a un montón de desconocidos con los que no logré entenderme ( esta semana me ha quedado mucho más claro el tema de la globalización)

Ya el domingo por la noche había empaquetado mis tesoros y mi mundo exterior estaba desordenado en cajas y más o menos podía respirar ( más menos que más pero una que es muy voluntariosa y esforzada llevaba haciéndose(me) un tercer grado para la ocasión ante lo que yo imaginaba que podía ser la cosa)

Bien pues cuando llego el lunes, a comer a casa claro, porque es lo natural... mi mundo/desorden/en cajas ya no era mi mundo, mis cajas, estaban apiladas en la cocina, mis pocos muebles lo mismo... los profesionales de la reforma trataban de explicarme lo que habían hecho mientras yo absolutamente consternada no podía dejar de mirar un microondas que había en medio del salón y me preguntaba que demonios hacía allí y... si era el mío... al final no era el mío y viendo el interés que me suscitaba el pequeño electrodoméstico tuvieron a bien explicarme ( no sin cierta dificultad... que importancia cobra la comunicación gestual en ciertos momentos) que ellos no salían a comer que lo hacían allí... me quedé notas.

Lo cierto es que ellos podían hacerlo yo no porque para llegar a mi comida tenía que escalar... así que les sonreí... creo y me fui a comer algo pensando que cuando volviera ya no estarían y al menos podría pensar que hacer con tal desbarajuste ¡qué ilusa!, No sólo la cocina estaba tomada sino que mi cama estaba detrás de un montón de muebles así que para dormir tuve que trepar por una cómoda y dos sillones... llevo una semana de locos, comiendo lo que puedo donde puedo, trabajando como doce horas, practicando escalada nocturna, con un microondas en medio de mi salón y ¿saben una cosa?...NO ME HAN INVITADO A COMER LOS MUY DESCONSIDERADOS.

Espero (deseo, necesito, añoro...) que todo vuelva a su natural orden en breve, de momento intentaré pasarme por sus casas cuando pueda y publicaré pues eso... cuando pueda.

Gracias por seguir ahí

Seguro que recuerdan la controvertida TRAINSPOTTING ( Danny Boyle, 1996), seguro que si la recuerdan también recuerdan esta canción y seguro que en ambos casos no se quedaron indiferentes...

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...añoro el desorden de la foto...