Agosto es ese mes en el que medio país está de vacaciones mientras el otro medio que permanece trabajando se las ve y se las desea para... llevar acabo su trabajo sin tener que necesitar a ese otro medio... delicioso. Es un mes en el que si no sabes... aprendes a rezar
- Virgencita que no se me estropee la fotocopiadora
- San Pancracio que el servidor de Internet no haga ¡plof!
- Santa Restituta que la red no se declare en huelga...
Es tremendamente desolador encontrarte un problema técnico en Agosto y que llames a un teléfono y... salte un fax; desolador e inquietante ¿Y ahora que hago? Te preguntas.
Ayer perdí más de dos horas, con el consiguiente mosqueo, en primer lugar tratando de buscar el número de Toshiba en España, segundo que fuera el que necesitaba porque no se imaginan la cantidad de departamentos (divisiones o como demonios se llame eso) que tiene esta empresa ( luego me quejo cuando llamo a alguna administración y empiezan a amenizarme la espera con distintas musiquitas y a pasarme de mano en mano eso sí después de hacer que les cuente toda la película... en fin... injusta y desconsiderada soy con el funcionariado).
Más tarde cuando por fin localizas el número adecuado de la “división” empresarial al menos tienes un poco de suerte y en un polígono industrial de los alrededores hay un proveedor de consumibles de esta marca, tecleas el número y tras unos segundos escuchas una vocecilla metálica que te dice que ese número no existe, te preguntas ¿pero cómo no va a existir? Vuelves a marcar y la misma cantinela... tu cerebro empieza a funcionar como una locomotora y en ese extraño juego que es la asociación de ideas te das cuenta que estas marcando desde el inalámbrico y que ese terminal (que es muy cómodo) por alguna extraña razón hace estas cosas de no reconocer los números, cuelgas y vas al fijo de tu mesa, marcas y... te devuelve el tono, le cuentas a la persona que está detrás la historia y le peguntas la dirección exacta ( te dice que está justo enfrente de la BMW... esto es fácil conozco esta marca de coches, te dices), cuelgas y... te vas de excursión... total como no tienes que hacer nada... una tarea más.
Un polígono industrial es una buena idea, lo es más si sabes a donde vas y alcanza el grado de excelente cuando encuentras lo que buscas; encontrar la BMW me resultó sencillo pero... “enfrente de... “ no es “encima de... “ un pequeño matiz en la localización que me tuvo buscando un buen rato mientras pensaba en la animada charla que iba a tener cuando nuestro proveedor “oficial” volviera de sus merecidísimas vacaciones.
Por cierto hoy es la Virgen de Agosto y la verdad es que yo no conozco a nadie que se llame Agosto ¿Ustedes?